lunes, 29 de agosto de 2011

“Manténganse hambrientos. Manténganse alocados”- Discurso de Steve Jobs

El 12 de junio del 2005 Steve Jobs dio un discurso en la ceremonia de graduación de la Universidad de Stanford. Conto 3 historias la primera era acerca de la conexion de puntos y dijo: “No pueden conectar los puntos mirando hacia el futuro; solamente pueden conectarlos mirando hacia el pasado. Por lo tanto, tienen que confiar en que los puntos de alguna manera se conectarán en su futuro. Tienen que confiar en algo – su instinto, su destino, su vida, su karma, lo que sea. Esta perspectiva nunca me ha decepcionado, y ha hecho la diferencia en mi vida.”. Confiar siempre es la clave para que las cosas salgan bien.

La segunda historia es sobre el amor y la pérdida, pues a los 30 años había perdido todo, lo echaron de la empresa que él había fundado, aunque parecía estar derrotado lentamente comenzó a entender que el todavía amaba lo que hacía, había sido rechazado pero aun seguía enamorado así que decidió comenzar de nuevo.
“En ese entonces no lo entendí, pero sucedió que ser despedido de Apple fue lo mejor que podía haberme pasado. La pesadez de ser exitoso fue reemplazada por la liviandad de ser un principiante otra vez, menos seguro de todo. Me liberó para entrar en uno de las etapas más creativas de mi vida. Durante los siguientes cinco años, comencé una compañía llamada NeXT, otra compañía llamada Pixar, y me enamoré de una asombrosa mujer que se convirtió en mi esposa. Pixar continuó y creó la primera película en el mundo animada por computadora, Toy Story, y ahora es el estudio de animación más exitoso a nivel mundial. En un notable giro de los hechos, Apple compró NeXT, regresé a Apple y la tecnología que desarrollamos en NeXT constituye el corazón del actual renacimiento de Apple. Además, con Laurene tenemos una maravillosa familia.” Así descubrió que algunas veces perdiendo también se gana, fue una amarga medicina pero el paciente la necesitaba. “Estoy convencido que lo único que me permitió seguir fue que yo amaba lo que hacía. Tienen que encontrar eso que aman. Y eso es tan válido para su trabajo como para sus amores. Su trabajo va a llenar gran parte de sus vidas y la única manera de sentirse realmente satisfecho es hacer aquello que creen es un gran trabajo. Y la única forma de hacer un gran trabajo es amando lo que hacen. Si todavía no lo han encontrado, sigan buscando. No se detengan. Al igual que con los asuntos del corazón, sabrán cuando lo encuentren. Y al igual que cualquier relación importante, mejora con el paso de los años. Así que sigan buscando hasta que lo encuentren. No se detengan”

Termino contándonos la tercera y última historia que trataba sobre la muerte. Comenzó con una frase muy interesante: “Si vives cada día como si fuera el último, es muy probable que algún día hagas lo correcto”. A sus 33 años le habían diagnosticado un cáncer que muy probablemente fuera incurable, en aquel momento se dio cuenta que la muerte no distingue entre ricos y pobres, buenos y malos, esta siempre acechante siempre tan inesperada que se presenta de pronto no con estruendos ni con señales importantes que lo anuncien sino deslizándose de forma imperceptible. Afortunadamente una intervención revelo que era un tipo de cáncer que tenia cura pero desde aquel día cada mañana se pregunta: Si hoy fuera en último día de mi vida, ¿querría hacer lo que estoy a punto de hacer hoy?” Y si la respuesta ha sido “No” por varios días seguidos, sabe que necesita cambiar algo. Concluyo diciendo: “Su tiempo tiene límite, así que no lo pierdan viviendo la vida de otra persona. No se dejen atrapar por dogmas – es decir, vivir con los resultados del pensamiento de otras personas. No permitan que el ruido de las opiniones ajenas silencien su propia voz nterior. Y más importante todavía, tengan el valor de seguir su corazón e intuición, que de alguna manera ya saben lo que realmente quieren llegar a ser. Todo lo demás es secundario.”


“Manténganse hambrientos. Manténganse alocados”

0 comentarios:

Publicar un comentario